En este periodo de aislamiento social, la vida de nuestras mascotas también se ve alterada. Los gatos son de carácter más independiente, y extrañan su silencio y su espacio, mientras que para perros disminuyen sus paseos, desaparece casi toda interacción con otros canes, y necesitan estimulación. Además, la presencia de los dueños en casa modifica sus patrones de sueño, y al ser estos tan perceptivos con las emociones, pueden estresarse fácilmente.
Algunas señales de estrés en perros son pérdida de apetito, vocalización excesiva, gruñidos al acercarse, pupilas dilatadas, vómitos, patas sudorosas, entre otras. Los síntomas son bastante amplios, por lo que se deben analizar en su conjunto. No está de más señalar que el estrés puntual y moderado no es siempre perjudicial. Sin embargo, el estrés grave debe prevenirse, pudiendo causar trastornos de ansiedad, agresividad y predisposición a enfermedades infecciosas.
QUÉ SE RECOMIENDA
El Diario de Antofagasta habló con Jaime Berrios, médico veterinario de la Clínica Veterinaria House Vet, quien dice, “creo que la forma más apropiada de manejar esta situación es ir adaptando a nuestras mascotas paulatinamente a los cambios en la medida de lo posible, y dedicarles más tiempo a ellos si no pueden salir de casa. Por ejemplo, si salían a pasear 4 veces al día, sacarlos 2 o 3 veces mínimo, y en la hora del paseo que no se va a realizar, dedicarnos a jugar o a compartir con ellos; este podría ser el momento de enseñarles trucos o adiestrarlos en algo”.
Dependiendo del tamaño y la raza de tú mascota, se recomienda correr de cinco minutos a media hora con un perro adulto. Los perros necesitan establecer un ritmo al igual que los humanos, por lo que se recomienda iniciar con una caminata rápida y escalar la intensidad. Tú mascota debería ser recompensada, hidratada y reconfortada después de esto. Esta actividad debe evitarse en cachorros, que podrían lesionarse.

Igual de importante que el ejercicio físico, es la estimulación mental, siendo ellos seres cognitivos y emocionales. No se puede suplir uno por el otro, y la falta de este último puede generar problemas de comportamiento como la destrucción de objetos personales y excitabilidad excesiva. Hay varios implementos que podemos usar en casa, y Berrios recomienda los juegos de olfato, como ocultar galletas en alfombras peludas o rollos de papel higiénico.
“Motivar al perro a emprender diferentes acciones es otro juego divertido que sirve para estimular su mente. La señal para cambiar de actividad (entre otras, para pasar de coger una pelota a correr por el pasillo en busca de su juguete o recibir un abrazo) puede estar precedida de un enérgico y simpático “un, dos, tres”, que funcione de detonante para modificar la acción” también señaló.
Con respecto a la crisis sanitaria, aconseja ir a lugares abiertos sin aglomeración de gente, utilizar siempre correa y mantener distancia con personas y animales. Al llegar a la casa, se le debe lavar al perro sus patas con agua y jabón, y en ningún caso con alcohol gel, alcohol puro o cloro, que son irritantes a la piel de tanto perros como gatos. “En el caso de que nuestro perro o gato presente problemas de salud, debemos poner atención a los signos, intentar comunicarse con su médico veterinario por teléfono o videollamada para que evalúe la urgencia, y llevarlo a la clínica solo si es una situación de gravedad”.
Para quienes necesiten más orientación veterinaria, la Municipalidad de Antofagasta ha habilitado una línea para resolver dudas desde la casa, +947561755.
