El Juzgado de Garantía de Calama decretó este sábado la prisión preventiva de David Alderete Menacho, a quien el Ministerio Público imputa el delito de femicidio en contra de Lucía Chicchi, cuyo cuerpo fue encontrado el martes 20 en un vertedero clandestino en el sector sur Calama.
El Tribunal determinó que la libertad del imputado es un peligro para la seguridad de la sociedad y que existen antecedentes suficientes que dan cuentan de la existencia del hecho formalizado por el Ministerio Público, con penas que van desde los 15 años y un día de cárcel.
Lo anterior, debido a que el cadáver de la mujer fue encontrado con una herida toraxica en la espalda, a la vez que informes de autopsia señalan que esa seria la causa de la muerte, la cual es una herida de tipo homicida.
Asimismo, Alderete Menacho sostenía una relación con la víctima, siendo su conviviente por 14 años y tenían además dos hijos en común, por lo que concurren los elementos para el delito de femicidio. En concreto, la víctima tuvo diversas heridas, entre ellas, una cortopenetrante toráxica posterior (espalda), lo que la llevó a sufrir un shock hipovolémico e insuficiencia respiratoria aguda, neumotórax, hemoperitoneo y neumoperitoneo.
De acuerdo al Tribunal, existen presunciones fundadas de la participación de David Alderete en el crimen, tal como sostiene el Fiscal Eduardo Peña, por cuanto la forma en que se encuentra el cadáver fue guiada directamente por el imputado y que la única manera de llegar al lugar era que el sujeto tenia perfecto conocimiento de ubicación del cuerpo de la víctima.
Asimismo en el lugar del asesinato, un domicilio de calle Tocopilla, se realizaron pruebas con luminol y se determina un sector de 2 más cuadrados donde se aprecian trabajos de limpieza abundante. A lo anterior se suma la declaración de testigos que indican que se escucharon gritos al interior del domicilio en la fecha de comisión del crimen.
CONFESIÓN TELEFÓNICA
Una de las pruebas claves que vinculan a David Alderete con el crimen, fue la confesión que el sujeto realizó telefónicamente a un hermano y también a un amigo. Una llamada telefónica que fue interceptada por Carabineros, debidamente autorizado por el tribunal antes de realizarla.
“Yo maté a Lucy” dijo el sujeto, rompiendo en llanto. Asimismo en otra llamada telefónica realizada a un amigo, el sujeto señaló: “Sólo me quise defender, se me fue la mano“.
La defensa del acusado sostiene la tesis de que el crimen se habría cometido por legitima defensa, sin embargo en esta etapa de la investigación, para el Tribunal no hay elementos par probar esta tesis, que se sustenta solo con la declaración del imputado, por cuanto no es compatible con elementos de la investigación, ya que a lesión a la víctima fue por la espalda y el imputado no tiene ninguna herida.
Para la investigación del delito el tribunal fijó un plazo de 120 días, que el imputado deberá cumplir en la cárcel, decretándose además medidas de cuidado especiales para la integridad del sujeto y la práctica de un examen de ADN para cotejar con la escena del crimen.
