Empezó septiembre y por lo tanto, las celebraciones patrias. Miles de antofagastinos festejaron durante cinco días con comidas típicas, volantines, terremotos y juegos. En este contexto, es que se produjo grandes cantidades de basura en el sector que por el viento fueron arrastradas a la vertiente La Chimba, reconocido humedal urbano que a pesar de contar con protección institucional, Carmen Serrano, presidenta de la asociación Raíces Endémicas, indicó que “no hay pequeñas obras que promuevan la protección, que señalen que es un área protegida donde habitan especies endémicas o resguarden el acceso al mismo”.
Por este motivo, es que a través de la autogestión, la organización ha decidido acudir al sector para reparar los daños mediante un operativo de limpieza, recogiendo un total de 4 bolsas de 125 litros llenas de basura entre bolsas de plástico, volatines, cajas y otro tipo de residuos.


Frente a la contaminación, Serrano se refirió a la gestión de manejo de residuos. “Antofagasta tiene una pésima cultura sobre esto. Asimismo, tampoco existe un plan formal de gestión de basura, eso genera que las personas boten sus residuos donde se les antoje”, recalcó.
Además, mencionó que la Municipalidad de Antofagasta es la entidad que actualmente maneja la administración del humedal La Chimba y que se encuentra en proceso de levantamiento de las amenazas que afectan a estas áreas protegidas, mediante la reciente constitución del Comité Comunal de Humedales.
Comité Comunal de Humedales
Creada con el fin de promover la adecuada gestión de humedales urbanos a través de la participación de la Municipalidad con distintos organismos de sociedad civil como Juntas de Vecinos, establecimientos educacionales, organizaciones no gubernamentales, entre otros, se generó esta instancia colaborativa que busca recuperar, restaurar y conservar los santuarios naturales en la ciudad.
Sin duda este es un paso importante para cumplir con la conservación de la naturaleza en Antofagasta, pero sin el real concientización de la ciudadanía y de organizaciones privadas o públicas, seguiremos viendo escenarios como el de la vertiente La Chimba, que mientras el resto de los antofagastinos celebraba un nuevo año de Fiestas Patrias, se vio afectado colateralmente por la huella ecológica humana.