Hace algunas semanas, en Diario Antofagasta publicamos una columna con una pregunta provocadora: ¿Qué pasaría si el humorista venezolano George Harris pudiera votar en Chile? Y es que un número no menor de extranjeros —algunos sin mayor vínculo ni cariño por nuestro país, ni conocimiento de su historia e instituciones— podrán participar en las próximas elecciones presidenciales y parlamentarias.
Todo esto nos remonta al llamado “Cucutazo”: la invitación del expresidente Sebastián Piñera a un gran número de migrantes venezolanos para que buscaran refugio en Chile ante la dictadura de Nicolás Maduro. “¡Vénganse a Chile, tenemos trabajo para todos ustedes!”, decía el exmandatario. Cientos de miles respondieron a ese llamado y hoy, tras más de cinco años en el país, podrán votar.
¿Se deberían exigir más requisitos para el voto extranjero? Más allá de la respuesta que cada lector tenga, lo cierto es que este tema revela un impresionante giro —y contradicción— en las posturas de representantes políticos tanto de izquierda como de derecha.
Por un lado, sectores de derecha y extrema derecha que se han autodenominado patriotas, defensores de la república y promotores de “chilenos primero”, hoy están a favor de que extranjeros voten, ya que —según sus propios cálculos— ese voto en alto porcentaje favorece a su sector.
Por otro lado, desde la izquierda, quienes por años sostuvieron un discurso pro-migración en nombre de la pluriculturalidad, la integración y el aporte cultural, ahora encabezan las voces que exigen mayores requisitos para el sufragio extranjero. ¿La razón? Ven un inminente desastre electoral.
Finalmente, ni los primeros eran tan patriotas, ni los segundos tan progresistas. El camaleón cambia de colores según la ocasión.
Lo que realmente necesitamos es que el debate sobre el voto extranjero en Chile se aborde con seriedad, anteponiendo el interés del país a los cálculos partidarios. Es hora de dejar la calculadora y empezar a legislar con visión de futuro.
También puedes ver: El análisis en el programa Sentido Común sobre el voto extranjero y las contradicciones políticas en Chile.