En un despliegue policial sin precedentes, la Brigada de Lavado de Activos de la PDI, en colaboración con la Fiscalía Local de Pudahuel, ha desmantelado una vasta organización criminal que ha operado ilegalmente desde 2015.
La red, integrada por siete clanes empresariales, ha sido acusada de defraudar al Fisco a través de la creación y uso de empresas ficticias, emitiendo más de 100.000 facturas falsas para solicitar devoluciones indebidas de impuestos, reducir cargas tributarias y generar IVA fraudulento.
Con un perjuicio histórico que asciende a más de $240.000 millones, el Servicio de Impuestos Internos ha calificado el caso como el fraude más grande registrado en el país. La operación, que ha sido meticulosamente coordinada a nivel nacional, resultó en allanamientos simultáneos en 83 domicilios esparcidos en diez regiones de Chile, desde Arica y Parinacota hasta Los Lagos.
Los detenidos, actualmente 55 personas, enfrentan cargos por asociación ilícita, delitos tributarios, delitos aduaneros y lavado de activos. La investigación ha revelado que la organización no solo se lucró con las ganancias ilícitas, estimadas en más de $30.000 millones, sino que también reinvirtió en un espectro diverso de activos, incluyendo la adquisición de criptomonedas, fondos mutuos, moneda extranjera, y propiedades.
En el operativo se incautaron $30.542.000 en efectivo, USD 59.371, 22 vehículos de alta gama, y se aplicaron medidas cautelares a 47 inmuebles y 343 vehículos. Además, las autoridades han congelado 424 cuentas bancarias y tres monederos de criptomonedas. Entre las armas decomisadas figuran revólveres, pistolas y armas largas, además de casi 4.000 cartuchos de munición y un chaleco antibalas. También se confiscaron joyas, relojes de alto valor y 563,4 gramos de marihuana.
El patrimonio recuperado en la operación se estima en alrededor de $27.000 millones, sin contar los saldos de las cuentas congeladas. Este golpe a la delincuencia organizada representa un importante avance en la lucha contra el fraude y la corrupción en Chile, recuperando un significativo monto para las arcas del Estado y destacando la eficacia de las autoridades en su combate a las redes delictivas financieras.