
No es un misterio que en el mundo las mujeres se sienten inseguras al caminar solas por la noche, viajar sin compañía o incluso pasear a su mascota, actividades normales pero que pueden convertirse en un gran problema para la seguridad de la mayoría de ellas.
Tristemente nuestro país y en especial Antofagasta no es la excepción, sin embargo, las mujeres del norte se destacan por su fuerza y como una forma de entregar seguridad mutua entre chicas, nació “Amiga, caminemos juntas. Antofagasta”. La administradora del grupo en Facebook, Ruth Ponce, explicó las razones para la creación de la iniciativa “nace desde el afán de apoyar a otras, de tener empatía, de consolar a las mujeres que han sufrido eventos traumáticos en su vida y apoyarlas”
“Cuando una mujer se sienta insegura de andar sola por la calle, porque es de noche, está en un barrio peligroso, no tiene plata para regresarse en micro, trabajo, estudio o haya tomado mucho, ella pueda acudir a otra mujer en este grupo para que la acompañe, la ida es que señale en el grupo en qué lugar se encuentra, sus característica para que otra chica pueda ir y acompañarla”, agregando que “no es un grupo destinado a organizar marchas, ni a conseguir fines políticos, simplemente su fin es ayudar a otra mujeres que por sentirse solas, intimidadas o con algún miedo no son capaces de hacer las cosas que quieren hacer”.
El grupo comenzó con 50 miembros y ahora suman más de 40 mil antofagastinas, “se ha masificado harto, muchas niñas han brindado su ayuda. Las personas que ofrecen las actividades, ellas deciden lugar y horario porque hay que ser consideradas con la persona que ofrece gratuitamente sus conocimientos”.
“Entre otras actividades, se han manifestado chicas con ideas de un Círculo de Mujeres, clases de Yoga, una chica se ofreció hacer un curso de asesoría de imagen y automaquillaje, una deportista se ofreció a que si alguna chica quería salir a trotar con ella o que nos coordináramos para salir a trotar todas juntas, una psicopedagoga para los hijos de las mujeres le grupo, estamos gestionando una asesoría legal para las mujeres que hayan sido agredidas”, añadió.
Dentro del grupo existen algunas reglas respecto a la organización, cualquier mujer puede unirse y es libre de publicar en el grupo y “siempre aparece alguien que puede ayudar, otra que tiene una conocida y alguien que se puede conseguir el lugar, de esa forma vamos funcionando, a través de cooperaciones voluntarias”, explicó la joven.
“Las mujeres se muestran agradecidas, contentas y muy participativas. Se han formado grupos de whatsApp por sectores. Algunas chicas cuentan sus problemas, sus historias y las demás las apoyan, tratan de consolarlas, les dan ánimos. Las chicas tienen la intención de generar lazos, de hacer nuevas amigas y de hacer cosas que quizás solas no se atreverían hacer”, finalizó Ruth.